Dejé dos libros por la mitad, por motivos opuestos.
El mago, de John Fowles me pareció que tenía una trama interesante (no demasiado original, digamosló), pero en la página 200 de 600 decidí que me había cansado su falta de sutileza (quién define sutileza, etc., dejen los comentarios al margen: falta de sutileza, dije, y ahí se queda). Me ayudó a comenzar a comprender, sí, qué tiene Otra vuelta de tuerca de obra maestra: lo que no tiene este libro. Podría citar un párrafo como ejemplo pero no tengo ganas y no tengo el libro.
Trópico de Cancer, de Henry Miller me fascinó al principio, me dio ganas de ir a Paris a recorrerlo, pero en la página 110 de 250 decidí que me había cansado su falta de trama, trama en un sentido amplio, no sólo de discurrir sino de elaborar. Ya conocía a los personajes y ya los párrafos brillantes me cansaron por repetidos. Tal vez me perdí algo. Vuelve a la biblioteca, a esperar por unos años más, andá a saber.
martes, noviembre 27, 2007
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14 comentarios:
Como que no tenés el libro?
Como que no tenés el libro?
¿Acaso el libro era de Zeta?
No me gusta ese pretérito imperfecto, Circe. No me gusta.
qué es un libro, sino una cáscara? Lo importante es lo de adentro.
No?
mmm entonces no me equivoqué en la interpretación de los mensajes de Zeta... Por las dudas aclaro, yo no se nada!!!
Y, Rodia, cuando vuelva a tirar las cáscaras, avíseme.
posteá algo del Trópico, dale
por lo demás, mandame todas las cáscaras que te sobren, serán recibidas con entusiasmo
"En el sueño, Su Majestad veía que en su presencia se levantaba una estatua muy grande y brillante, y de aspecto terrible. La cabeza de la estatua era de oro puro; el pecho y los brazos, de plata; el vientre y los muslos, de bronce; las piernas, de hierro; y una parte de los pies era de hierro, y la otra de barro. Mientras Su Majestad la estaba mirando, de un monte se desprendió una piedra, sin que nadie la empujara, y vino a dar contra los pies de la estatua y los destrozó. En un momento, el hierro, el barro, el bronce, la plata y el oro quedaron todos convertidos en polvo, como el que se ve en verano cuando se trilla el trigo, y el viento se lo llevó sin dejar el menor rastro. “
(Daniel 2,34)
[dios bendito, traten de ubicar una cita bíblica en la web, y fijensé toda la porquería que encuentran]
es que todos saben que la web la carga el diablo.
Habría que hacer una recopilación de respuestas breves de circe.
Aunque, no. Es mejor que queden así, como perlitas que van guiando a los incautos hacia algún círculo del Hades.
Hacia el segundo, le diría, pero sería una guarangada de mi parte.
la web la carga el diablo y la descargan los bol... (por aquello del tipo que va con un disquette y le pide al administrador de la red si no le graba Internet)
Puestos a elegir, es un muy buen círculo.
Y, Jahey, no andaba tan errado, ese; hoy ya se puede andar con la internet a cuestas.
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