miércoles, noviembre 22, 2006

Uno, dos, tres, cuatro

Uno: Manuelita tiene que ser la canción infantil perfecta. A lo mejor es porque se mezcla con recuerdos. Valentina aplaude con Sweet Jane, con Manuelita no. Pero se queda quietita escuchando

Tantos años tardó en cruzar el mar
que allí se volvió a arrugar
y por eso regresó
vieja como se marchó.
A buscar a su tortugo que la espera en Pehuajó.

(Manuelita - María Elena Walsh)

Dos: se murió Robert Altman, el director de mi película más preferida de todas: Las reglas del juego. Hay una escena (los que la vieron tienen que recordarla) donde el cambio entre comedia y tragedia es tan abrupto que lo deja a uno temblando por un ratito. A mí, al menos. Un fenómeno Altman. Y nunca ví M.A.S.H.

Tres: ayer escuché algo como "no me imagino un lenguaje donde no haya relación verbo-objeto" o algo así. Y me acordé de Tlön, Uqbar, Orbis Tertius:

Hume notó para siempre que los argumentos de Berkeley no admiten la menor réplica y no causan la menor convicción. Ese dictamen es del todo verídico en su aplicación a la tierra; del todo falso en Tlön. Las naciones de ese planeta son -congénitamente- idealistas. Su lenguaje y las derivaciones de su lenguaje -la religión, las letras, la metafísica- presuponen el idealismo. El mundo para ellos no es un concurso de objetos en el espacio; es una serie heterogénea de actos independientes. Es sucesivo, temporal, no espacial. No hay sustantivos en la conjetural Ursprache de Tlön, de la que proceden los idiomas "actuales" y los dialectos: hay verbos impersonales, calificados por sufijos (o prefijos) monosilábicos de valor adverbial. Por ejemplo: no hay palabra que corresponda a la palabra luna, pero hay un verbo que sería en español lunecer o lunar. Surgió la luna sobre el río se dice hlör u fang axaxaxas mlö o sea en su orden: hacia arriba (upward) detrás duradero-fluir luneció. (Xul Solar traduce con brevedad: upa tras perfluyue lunó. Upward, behind the onstreaming it mooned.
(Tlön, Uqbar, Orbis Tertius - Jorge Luis Borges)

Cuatro:

Al salir del cementerio, cuando ya había concluido todo, Charles regresó a su casa. No había nadie en la planta baja. Subió al piso de arriba. En su cuarto vio un vestido de ella colgado al pie de la cama. Se apoyó contra el escritorio y se quedó allí hasta que se hizo de noche, sumido en un doloroso ensimismamiento. Ella, a fin de cuentas, lo había querido
(Madame Bovary - Gustave Flaubert)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

yo creo, realmente creo, que la feria del libro se retuerce en su útimo estertor. doloroso.
entre tanto, gangas maravishosas.

mas preferida. cute

Rodia dijo...

me preocupa más aun lo difícil que es conseguir una biblioteca en Montevideo. Or am I wrong?

Anónimo dijo...

Puta. No sabía que había muerto Altman. Me enteré por vos. Y automáticamente recordé lo mucho que me gustó Las Reglas del Juego. En la ecu la usaron en una clase para describir "el poder" de una toma en partícular. La toma en cuestión era la inicial, en que un larguísimo travelling iba entretejiendo diálogos y presentando personajes. Pero lo mejor de Altman no era la técnica. Era la habilidad por contar historias. Historias dentro de historias. Siempre quise conseguir una copia de The Player en DVD y nunca pude. Voy a volver a ponerme en campaña. Me gustó mucho tu blog.Saludos.

Rodia dijo...

En

http://youtube.com/watch?v=ANWY6w-S4JQ

está la toma inicial de The Player