martes, julio 31, 2007

Birdman, dijera diego.

Sólo dos historias tengo para contar de Bergman (anécdotas? soberbio!): fuimos a ver Detrás de un vidrio oscuro con mi hermano, y este animal comenta al salir: "La porno que hubiera hecho yo con este argumento". La otra, de un veterano que me contaba que por allá por los sesenta fue a ver Bergman cuando Bergman lo pasaban en circuito comercial porque el circuito comercial era otra cosa, antes, y salió sin entender mucho nada. Y se preguntó sí yo, tipo intelectual, no entiendo un pomo, para quién está dirigido esto? Y agarró y no fue más. Ya sé que es falaz, pero igual se me hace memorable.

Dicen los que saben que Bergman era, también, memorable. No sé. Buenas noches.

1 comentario:

Javier Couto dijo...

un asado cualquiera, domingo, ya sabiamos que la piba no tenia la luminaria completa, pero igual, surge el monster como tema de conversacion, la piba metia algun aviso, yo harto curioso porque capaz que despues de todo, capaz, por que no oh horrendo pedante?, hasta que en eso dice: lo mejor era cuando subia alto para recargar energia

listo

confieso que senti que el pedazo de universo que se jugaba en ese asado volvia a la normalidad