Igual, algo leí. A sangre fría es una muy bonita novela, muy bien escrita y extremadamente entretenida, que habla de dos asesinos con precisión periodística. Me resisto a clasificar esto como literatura mayor, pero se disfruta. Literatura mayor es Coetzee, un reverendo hijo de puta que en Elizabeth Costello se despacha con unos ensayos que muestran que escribe simple porque se le canta, y que lo muestra como un ser complejo, humano en fin. Igual el libro de Coetzee que me gustó menos... aunque el capítulo en el purgatorio es una ironía formidable sobre los sueños, los escritores, Kafka y supongo que muchas más cosas que se me escapan. Tengo por la mitad La maestra de piano de Elfriede Jelinek que me venía gustando bastante pero que medio abandoné ante el descubrimiento de dos (dos!) libros nuevos de Kawabata: La pandilla de Asakusa (su segundo libro, en el que juega a Joyce, algo de lo que luego se arrepentirá) y La bailarina de Izu que todavía no compré. Como siempre, un placer.
Creo que es todo. La próxima hablo de dibujitos.
4 comentarios:
Capote era un maestro. Pero no me extraña que no lo entiendas y le pongas al lado a Coetzee. Anda Firmin por ahí, capaz que Sauvage te gusta.
El mojo del piano ese es insoportable.
los oigo hablar y me siento tan culto...
sentate mejor, entonces, que no te queda.
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